Antiguo municipio francés, ahora unido a la nueva ciudad de Theix-Noyalo, Theix es un destino privilegiado en el corazón del departamento de Morbihan. Entre la naturaleza y la cultura, la historia y el patrimonio, el aire fresco y el ocio, Theix tiene lo necesario para conquistar muchos corazones. ¡Vamos!
Theix se encuentra a las afueras de Vannes, a las puertas del Parque Natural del Marais de Séné y de las aguas cristalinas del Golfo de Morbihan. Aunque no esté directamente sobre el mar, la ciudad de Theix está sin duda orientada hacia el agua: en efecto, está atravesada por un montón de cursos de agua, como el arroyo de Clérigo y el de Gorvello, los de Plessis, Kerandrun, Bizole, Talhouët o incluso el del estanque de Bonnervo, todos ellos alimentando el Golfo de Morbihan Destino en la encrucijada entre la zona que comienza con la aglomeración de Vannes y la península de Rhuys, Theix es conocida por su bello patrimonio. ¿Qué ver? ¡El Château du Plessis-Josso! Gran casa señorial fortificada de los siglos XIV y XV, cuenta con gruesas murallas, pero también con hermosas cocinas, un gran salón, una sala de ceremonias y decoraciones que podrá descubrir durante las visitas en la temporada de verano o durante los conciertos y exposiciones. Las capillas del siglo XVII de San José, San Miguel, San Roque y Santa Bárbara, así como la capilla de Notre-Dame-la-Blanche, merecen una visita, así como los numerosos indultos y otras celebraciones que acogen a lo largo del año. La cruz del cementerio, la fuente del siglo XVIII, la fuente de Guéhec y el molino de mareas del siglo XVI completan la visita a Theix.
Tómese también el tiempo de pasear por la aldea de Gorvello: bellamente florecida, ¡vale la pena visitarla por sus edificios! El sitio marítimo de Kerentré también merece una visita: situado en la carretera de Sarzeau, justo antes del puente de Noyalo, este lugar, como si estuviera congelado en el tiempo, es un paraíso de la biodiversidad, ¡que es una delicia para los observadores de aves! Podrá observar muchas especies de aves, tanto sedentarias como migratorias, en distintas épocas del año. ¿Y cómo no mencionar el parque Brural? Enclavado en una amplia zona boscosa, este parque de ocio a orillas del agua ofrece el marco perfecto para un tranquilo momento de relajación. Puedes ir a pasear, hacer un picnic o ir a pescar como quieras. Por último, hay muchos lugares que visitar en la zona: Vannes y su casco antiguo, muy orientado a la cultura, pero también Séné y sus playas, Saint-Armel, Arzon, l'Île-d'Arz y l'Île-aux-Moines serán lugares perfectos para relajarse, nadar y participar en actividades náuticas bajo el sol de Bretaña.