Si dicen "vacaciones de ensueño", ¿en qué estás pensando? A una isla rodeada de agua turquesa, donde la arena blanca y el sol reinan de forma suprema? Perfecto, así que no espere más: diríjase a las Baleares, y más precisamente a Porto Cristo, un balneario muy popular en la isla de Mallorca.
Porto Cristo es un auténtico pequeño puerto pesquero, pero no se corresponde con la idea que tenemos de él. Moderno, dinámico y, sin embargo, lejos de las habituales multitudes de las estaciones baleares, Porto Cristo es un verdadero rincón del paraíso. Salvado por el turismo de masas, el pueblo ha sabido conservar a lo largo de los años sus tesoros más bellos: sus playas. La playa del centro de la ciudad, justo al lado del puerto, es una de las más populares: 200 metros de largo y salpicada de numerosos parasoles y tumbonas, está bordeada por un agradable paseo peatonal salpicado de terrazas de cafés y restaurantes. Ideal para las vacaciones de natación en familia, es igual de ideal si quieres salir al mar para descubrir la costa este de Mallorca. Cala Anguila es una de las calas más secretas de Porto Cristo: rodeada de una densa vegetación, esta cala de arena fina ofrece hermosas vistas al mar abierto y permite burbujear bajo el sol a la sombra de pequeñas sombrillas de paja. La vecina Cala Mendia es una de las playas más bonitas de la costa este de Mallorca: un lugar de surf de renombre, que acoge a los surfistas durante todo el año (¡sí, incluso en invierno!) en un espléndido entorno en el hueco de las rocas y el verde bosque de pinos. Por último, Cala Romántica le sorprenderá con su arena blanca y sus bellos alrededores: agua turquesa, acantilados, sol.... ¡Tiene muchas ventajas para seducir a los veraneantes! En cuanto a los deportes acuáticos, Porto Cristo satisfará todos sus deseos! Un viaje en ferry con un fondo transparente para observar la belleza del fondo marino, navegación, pedaleo, surf, remo, jet ski, boyas remolcadas, habrá suficiente para toda la familia.
¿El otro activo de Porto Cristo? ¡Sus cuevas! Las cuevas del Drach son las más populares entre los veraneantes: estas cuevas prehistóricas de origen natural le sumergirán en el corazón de la historia de Porto Cristo. La Gruta Blanca, la Gruta Negra, la Gruta Francesa y la Gruta de Luis Salvador fueron excavadas por el mar, y hoy en día constituyen el mayor yacimiento subterráneo de las Islas Baleares. En el corazón de este mágico lugar, no podrá perderse el magnífico lago Martel, reconocido como uno de los lagos subterráneos más grandes del mundo, donde podrá realizar una excursión en barco a un concierto de música clásica. Un poco más adelante, también se pueden ver las cuevas de Del Hams ("cuevas del anzuelo"): si la Cueva Redonda es espléndida, no se pierda la impresionante Cueva Azul, asombrosa gracias a sus inmensas estalactitas y a sus iluminaciones.