Bañada por el mar Jónico por un lado y el mar Tirreno por el otro, Calabria se encuentra a pocos kilómetros de Sicilia y sus costas. Conocida como la punta de la "bota", esta región
está lleno de magníficos lugares para descubrir. Entre costas rocosas, playas de arena fina y mares de un azul profundo, podrá disfrutar de la costa en Palmi, Tropea, Ricadi o Capo Vaticano. El interior, más montañoso y formado por lagos, montañas, cascadas y bosques, hará las delicias de los amantes de la naturaleza. En cuanto a la historia, varias maravillas que se remontan a las olas de la colonización griega le esperan en esta región de sorprendentes tesoros.